lunes, 20 de septiembre de 2010

5. Amazonas... La Ruta del Gran Vilaya hacia Kuelap...

Partimos en una station a las 9.30 am hacia la provincia de Luya donde están las ruinas de Wanglic, ahí realizamos una caminata de 2 hrs aprox., donde pasamos por una caída de agua observando las tumbas en las paredes casi verticales de las montañas (entiendo que por ello también llaman al lugar “pueblo de los muertos”) llegando al final a unas ruinas pre inca (pequeñas casas circulares) cerca del rio. Luego, nuestro transporte nos llevo a un pueblo cercano donde almorzamos dentro de un Mercadillo. Recuerdo que frente a nuestra mesa había un puesto de Carne que tenía un par de cabezas de res que parecían que miraban nuestros platos… de hecho no fue de lo más agradable, pero ni yo ni mis dos compañeros de viaje dijimos algo… se veía que teníamos hambre…

Por la tarde, teníamos como destino visitar los sarcófagos de Karajia, aquí también tuvimos que caminar casi 2 hrs para poder observarlos, ya después de ello nos transportamos al Valle de Belén donde llegamos a una cabaña para pasar la noche. Luego de la cena y fogata nocturna nos echamos a dormir, que fue lo que más espere, ya que mis últimas dos noches no fueron buenas…

En la mañana siguiente, luego de ir al silo (el baño usual en el campo), empezamos nuestro trekking de tres días. Caminamos por el Valle de Belén, que es un gran jardín surcado por un sinuoso y pequeño rio con forma de serpiente donde hay ganado pastando…, donde el paisaje es realmente hermoso y uno no quisiera irse… pero nosotros estamos de paso, así que había que tomar muchas fotografías para el recuerdo…

El grupo estaba formado por un Ingles (John), un francés (Stephen), el guía, el arriero, las mulas y yo. El Ingles era un tipo cuarentón, que tenia la pinta de Sean Penn mezclado con Indiana Jones, no hablaba español así que toda la comunicación con él fue en ingles. El francés era algo más joven, seguro pasaba los treinta, el si hablaba español así que la comunicación fue más fluida . El guía y el arriero solo hablaban español por lo que para comunicarse con el Ingles lo hacían a través del Francés o de mi (con mi Ingles parchado).

La caminata duró cerca de 6 hrs. Donde tuvimos que cruzar un rio, un pequeño pantano, un bosque de nubes; y cruzar distintos microclimas que hacían más entretenido y sorprendente el viaje. Al medio día nos detuvimos a mitad del camino, donde el guía y el arriero cocinaron para el almuerzo, así que nosotros aprovechamos para descansar y relajarnos mirando el paisaje. Por la tarde continuamos nuestra caminata, haciendo una parada en “La Pirquilla”, un complejo arqueológico de la zona, para luego llegar al pueblo de Congon donde ibamos a pernoctar en una casa de pobladores del lugar.

Eran 5pm cuando llegamos a Congon, donde solo se puede llegar a pie o a caballo, así que aprovechamos para ir a la cancha de futbol para ver un partido entre los pobladores, ahí nos enseñaron a Chacchar Coca con una sustancia alcalinizante, que en teoría te energiza mas… pero como fue poca la cantidad que chacchamos no hubo mayor efecto. En este pueblo no había electricidad, así que luego de la cena y conversar con los pobladores, nos fuimos a dormir para recuperar fuerzas ya que debiamos continuar en pocas horas con la caminata.

Al día siguiente por la mañana, el guía nos comentó que si queríamos podíamos hacer la ruta de este día en mula (Cruce de Caballo con Burro), así que los tres no dudamos en subirnos a una. Cabalgamos en pendiente, subiendo una montaña cerca de 3 hrs, los paisajes eran increíbles, el camino estaba lleno de vegetación y felizmente había algunas nubes y niebla que nos cubrían del sol. Mientras más subíamos, el camino se hacía más agreste, así que llego un momento en el que había que bajar de la mula, ya que el terreno era muy inclinado, después de ello llegamos a una explanada en mitad de la montaña, donde pude observar una zona deforestada, fue el momento triste del viaje… ver un territorio desolado de color tierra en medio del verdor de las montañas. En esta parada había una pequeña choza donde dejamos las mulas para realizar una pequeña caminata hacia unas ruinas Chachapoyas (El lugar se llamaba Lanche que recuerde) donde pude ver el árbol de la Quina, una especie que actualmente es muy difícil de encontrar en el Perú (este es uno de los símbolos del escudo nacional, pero muy poca gente sabe porque lo es). Después del almuerzo continuamos el ascenso montando las mulas, para mí fue muy difícil dominarla ya que era algo inquieta, pero como había un único camino no era necesario que sea un jinete super experimentado. Cuando estamos por llegar al final del camino, me di cuenta que la mula ya estaba algo cansada o arta de cargarme… creo ya no quería continuar, así que poco a poco se fue acercando al lado de un barranco, y comenzó a inclinarse lentamente como para votarme… realmente fue un momento de tensión, ya que si caía no estaría aquí escribiendo… , pero en segundos apareció el arriero y me ayudó… desde luego me baje y continúe a pie. Ya después me dio mucha risa lo que hizo la mula, pero el momento fue complicado. La cima no estaba lejos, solo unos metros más adelante y mientras me acercaba sentía mas satisfacción por todo lo que había pasado… estaba desbordante de alegría y muy emocionado de estar mas cerca del objetivo…

En la cima o final del camino, nos esperaba el transporte para llevarnos a Kuelap, donde llegamos en pocos minutos… eran seguro cerca a las 5pm cuando estuvimos frente a los grandes muros de la Fortaleza (que en algunas partes llegan a medir mas de 10m de alto), la euforia corria por nuestras venas, fue un momento indescriptible realmente… solo quedaba rendirse ante la grandeza que construyeron los Chachapoyas…

En ese momento no ingresamos al complejo, ya que debiamos ir al hospedaje… nosotros no solo estabamos entusiasmados por haber llegado sino tambien por qué ese día nos dijeron que el hospedaje tendría luz, baño y agua caliente… pero nada de eso sucedió. El primer hospedaje tenía un cuarto con huecos en el techo y una rata en las cañerías (a la vista), por lo que fue desechado en el acto. El segundo tenía toda la infraestructura, pero no tenía nada de lo ofrecido, así que las necesidades básicas tuvimos que hacerlas en un silo en plena noche a la intemperie… yo lo único que pensaba es…”llegue a Kuelap, no importa nada más”… Ya por la noche fuimos a la casa de un poblador a cenar, para luego tener una improvisada clase de astronomía dictada por el Ingles… saco su mapa de estrellas y comenzó a explicarnos como ver las constelaciones… fue muy interesante, lamentablemente me quedo muy poco de esto…
Esa noche no dormi bien, por el colchon que parecía madera y la ansiedad de querer ingresar a la fortaleza primero para que no haya mucha gente y asi poder tomar fotos libremente.

Ingresamos a Kuelap cerca a las 8.30am e iniciamos el recorrido guiado, duro cerca de 2.30 hrs, el lugar fue espectacular, mi sensación de estar ahí, como dije, fue indescriptible, la fortaleza con sus casas, templos, calles, muros, pasajes, ventanas, diseños y etceteras me llenaban de energía. La travesía para llegar fue agotadora pero todo lo valía por estar ahí… tome todas las fotos que pude y cuando eran cerca a las 11am empezamos a despedirnos… teníamos que bajar hasta el río…, fue una caminata realmente destructiva de cerca de 2.30 hrs, las rodillas sufrían mucho ya que la bajada era en pendiente pronunciada y agreste… pero había que hacerlo, era la parte final de la aventura…

Ya metros más abajo, llegamos al río Uctubamba (que más adelante se une al rio Marañón), terminando la caminata en el pueblo de Tingo, un terreno plano al costado del río, donde almorzamos trucha. Luego de esto, nuestro transporte nos regreso hasta Chachapoyas. Ahí, después de asearme, cambiarme y arreglar mis cosas para partir, salí a caminar por la ciudad para conocerla. Ya por la noche, nos dieron una cena de despedida (y para resarcir lo ocurrido con el hospedaje en Kuelap), para luego trasladarnos al terminal, ya que a las 8pm salía nuestro bus. Yo me dirigía al departamento de San Martin (no sabía exactamente a donde pero sabia que tenía que pisar el suelo de esta zona), así que el bus me dejo a las 9pm aprox. en el pueblo Pedro Ruiz Gallo que tiene una importante actividad comercial y donde está la bifurcación hacia la Costa (Izquierda) y hacia Rioja, Moyobamba, Tarapoto, Yurimaguas, entre otros (Derecha). En este lugar tuve que esperar cerca de 3 hrs para conseguir un bus que me lleve… recuerdo que era un bus de ruta, esos que paran en todo lugar donde hay vida… así que subi y dije… cuando salga el sol bajo…

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